CAPITULO 23!!

Hola!! a todos los seguidores del blog y de la historia Elements les pido una enorme disculpa en nombre de mi amiga Grecia (la creadora de este espacio) ya que los ha descuidado mucho... Pero no se enojen con ella como saben se cambio de casa y ahora por el momento tiene que atender muchos asuntos ""AmoRosOs !"" ... pero Yo (una muy buena amiga) estare subiendo los capitulos... mas frecuentemente...

Disfruten el capitulo.... y por nada en el mundo se pierdan el siguiente...

CAPITULO 23
Michael me estaba moviendo suavemente para despertarme, cuando abrí los ojos, el estaba muy cerca de mi pero resiste el impulso de darle un beso ¿Qué tal si tenían mal aliento?
-Hola- le dije
-Tenemos que irnos ya Aliz-
-Esta bien no tarde mucho en arreglarme- dije
-Lastima que yo ya me bañe- dijo el sonriendo
-Tarde o temprano volverás a bañarte!! Y yo…estaré ahí- dije sonriendo de igual manera
Me levante y me fui a bañar cuando salí Michael ya no estaba ahí, me puse unos pantalones negros, blusa blanca y zapatos de deporte decidí llevar mi pelo recogido en una alta cola de caballo. Termine y baje corriendo todos estaban en la sala.
-¿Nos vamos?- pregunte
-Solo faltaba usted- anuncio Félix
-Bien ya llegue, larguémonos-
-Alice, nosotros nos regresamos a la Academia- dijo Rosse
-¿Todos?- pregunte, si Michael no me acompañaba por lo menos espera que Rosse si, pero eso seria traer a Eric con ella, ya era su guardiana la verdad es que no había notado el cambio en mi vida sobre las asignaciones.
MIERDA. Eso me recordaba que yo TENIA que ir adonde fuera Michael yo soy guardiana. Con tantas cosas que pasaron, que no me acorde de ese punto, Michael iba a salir y yo no iba a ir con el. El pánico entro en mí.
-Todos- contesto
-Te veré pronto- dije resistiendo el impulso de correr CON Félix y negarme a ir.
-Claro que no creo que tardes mucho- dijo Rosse
Todos salimos y afuera había 3 enormes camionetas negras, en la nieve se veían espectaculares. Rosse, Eric, Mónica y Jessica… Jessica!!! Dios santo, se comía con la mirada a Sebastian. Huy, le deseaba suerte. Todos ellos al parecer regresaban a la Academia, ya me he de imaginar los chimes que se han de contar por allá. Pero ahora tenia que arreglar un asunto. Corrí hacia Michael, ya que en la camioneta entro Lena y Adrián su guardián.
-Michael- grite
-¿Qué, que pasa?-dijo un poco alarmado
-No, nada, solo que soy tu guardián tengo ir contigo ¿no? , Lo siento de verdad no recordé esto anoche cuando me mandaron a otro lugar que no fuera el tuyo, lo siento! No se supone que una guardiana se olvide de proteger lo que le fue asignado- dije con desesperación pues un no creí queme hubiera olvidado de algo tan importante
-Tranquila Amor, no pasa nada todo estas cosas que han pasado son demasiadas para ti – dijo acariciando mi cabello en la alta cola de caballo
-Pero…- empecé a renegar cuando Félix dijo
-Ya le asignamos uno, que lo cuidara igual que tú- dijo mientras Sebastian entraba a la camioneta
Michael y yo nos tensamos.
-¿Debes estar de broma?- le dije a Félix no me di cuenta del porque levanto su ceja, si por hablarle de TU o por el comentario
-Claro que no, el es guardián temporal….hasta que tu regreses- contesto y me di cuenta que el también me hablo de tu
-Tengo opción?-pregunto Michael
-No- contesto de inmediato Félix
-Entonces vámonos ya- dije
Me incline para darle un beso a Michael pero este lo hizo mas largo y profundo, que por un momento pensé en no dejarlo ni tantito.
-Vámonos!-grito Félix
Me senté en la parte del copiloto en enorme camioneta y la verdad tan pronto me senté me dieron ganas de bajarme, estar rodeada por tantos tipos músculos y luego vestidos de cuero era……atemorizante.
Ya habíamos manejado como 10 minutos de viaje sin decir nada hasta que Jacob hablo
-¿No es raro?- pregunto cuando no contesto nadie supe que se refería a mi
-¿El que?-
-Ese rollo de ustedes de estar emparejados con sus asignaciones, es muy raro nunca había visto tantos así y juntos y luego todos Amigos! – se echo a reír lo cual también me hizo reír a mi, pero a nadie mas
-Si es raro,¿ pero que le podemos hacer?, solo esperemos que no ocurra lo mismo con Jessica y Mónica he?- dije a broma Jacob río de nuevo
-Eso seria muy gracioso, pero de verdad si que es raro-
-Si ya lo creo- conteste
-Y eso de lo de tu abuelo Uff… toda una novela-
-Ho si, pero falta todavía un final ¿verdad? Esperemos de verdad que no sea tan malo-
-Vamos nena, que te podría pasar con nosotros cuidándote- respondió Jacob
Me solté a reír
-¿Nena?, y eso de “Nosotros cuidándote” se ve que tiene un autoestima alto –
Jacob río. Este tipo realmente me agradaba
-Nada más míranos-dijo burlón
-Ya niños, llegamos- dijo Félix
Mierda Santa. Ósea yo ya había venido aquí, y sabia que el lugar era enorme pero la ultima vez que vine estuve a punto de que me mataran y la verdad no puse mucha atención a la casa, y ahora que la miraba y sabia que era mía (cosa que todavía no creía), bueno….eran una Mansión enorme, con un jardín enorme, y paredes enormes todo era enorme.
-Pasemos- dijo Félix
Tan pronto como entramos, un enorme agujeró se abrió por la tierra todos dimos una vuelta en el aire aterrizando en suelo firme, un poco después de eso unas cosas venían corriendo de lo lejos, “Los chicos de cuero” como había decidido a llamarlos se pusieron alerta, ¡¿eran perros?!! O lobos!! Quien sabe pero no se veían para nada agradables eran una mutación espantosa
¡Y a nadie se lo ocurrió darme armas!.
Por suerte tenia otros medios.
Levante un muro de fuego antes de las cosas mutantes llegaran a nosotros, todos se alejaron del fuego y me miraron estupefactos
-Ya chicos, ¿soy una guardiana, que esperaban? ocúpense de ellos de prisa- dije por que la magia era agotadora
Deje caer la barrera de fuego y los “Los chicos de cuero” acabaron con nuestros amigos.
Al parecer no iba a ser nada fácil nuestro trayecto.